jueves, abril 20, 2006

Costumbre

Me duele, le dijo la mujer al viejo, me duele que ya no esté aquí.
¿Y hace cuánto se fue?
Lo dejé.
¿Y hace cuanto te fuiste?
No hace mucho.
Entonces el viejo inclinó el rostro.
El dolor de la costumbre pasa rápido,
el del amor siempre quema.
¿Y qué sientes?

Ella no le contestó. Eran prisas las
que la ataban, un resquemor apenas
de cenizas en la tarde.