lunes, septiembre 10, 2007

El asesino de estatuas

En una colonia en Monterrey, se robaron los bustos de tres de los niños héroes ubicados en una plaza. Los serrucharon con maestría, limpia la separación gracias a a la segueta. Ya imagino a los ladrones en la noche, calladitos pero dale y dale al cuello de Francisco Márquez o de Agustín Melgar. La noticia ha sido la nota principal del día junto con la explosión de un trailer en Nadadores, Coahuila y que dejó más de 25 muertos y decenas de heridos.
Hace un rato capturaron al asesino de estatuas y Cuauhtemoc Zamudio, el escultor, salió al encuentro del cercenador mientras calculaba al aire el costo de la pieza. El asesino de estatuas no es más que un pepenador quien vio la estatua, calculó cuánto le pagarían por ella en la compra de metales y se puso manos a la obra.
Fue imposible no acordarme del capítulo de Los Simpson donde Bart le corta la cabeza a Jeremías Springfield y todo el pueblo va tras él.
Otra cosa en la que Los Simpson nos tomó la delantera.
Por lo demás, nada se sabe aún de las otras cabezas.

2 comentarios:

Adriana Degetau dijo...

Los Simpsons son más real que lo real. Como el episodio del Main Street y la explosión de su truck de palomitas comparado con las zanjas de Iztapalapa, o como cuando en un episodio dicen literal que "en este país no mandamos a la cárcel a los famosos Krusty", tipo Paris Hilton...

El de-compuesto dijo...

Hace unos meses recuerdo haber leído una noticia de un pepenador del noreste brasileño que le amputó los brazos a una estatua de Pelé. Seguramente arguyó en su cabeza que un futbolista no los necesitaba.

Pero eso de robarse metales es super común en épocas de escasez. Estuve en Buenos Aires poco después de la supercrisis del 2001 y cuando pregunté qué había pasado con las rejillas de las coladeras y demás, me explicaron que había sido obra de los pepenadores.

Ni pex.

Oye, sigo buscando tu libro. No lo encuentro. Ayúdame.