lunes, abril 21, 2008

Adios mi tierno amor

Este fin de semana se llevó a cabo la última carrera de la Cham Car, antes serie Cart, antes Indy Car. La histórica competición se llevó a cabo en una de las pistas emblemáticas de la serie Cart, en la paradisiaca Long Beach. El triunfo correspondió a Will Power y el tercer lugar, que es lo que me importa, la piloto mexicano Mario Domínguez.
Domínguez se hizo de un nombre en la hoy extinta serie Cart. Su carrera inició con el equipo Herdez Competition, que en un principio era digirido por Hernández Pons y daba cabida a mecánicos, ingenieros, asistentes y auxiliares de equipo completamente mexicanos en una serie completamente norteamericana.
Domínguez llegó a la serie Cart cuando otro ídolo mexicano dominaba las pistas, me refiero a Adrián Fernández. Era un lujo para los aficionados mexicanos al deportes automotor ver esos tres carros con las estelas verdes, rojas y blancas alcanzar los 250 kilómetros por hora en las competencias callejeras, óvalos y más. (el tercer piloto era Michael Jourdain).
Sin embargo, cuando los problemas económicos llegaron a la serie y tanto Fernandez como Jourdain salieron a la Indy Car el primero, a la NASCAR el segundo, la serie perdió interés para el público mexicano. Sólo Mario Domínguez permaneció como el estandarte azteca en una serie que poco a poco empezaba a perder su estilo.
Cambios de equipo después, falta de patrocinadores, relegaron a Mario Dominguez de varias temporadas, al tiempo que la chispa de la Champ Car, antes Cart, se desgastaba en las pistas., hasta el casi patético final de incorporarse a la serie rival, la Indy Car.
Con todo y esto, sólo quedó pendiente una última carrera, la de Long Beach. Los autos de la champ se presentaron en la pista para despedir a una serie por la que pasaron grandes nombres como Montoya, Fitipaldi, Tracy, Bourdais, Adrian Fernández, Helio Castro Neves y muchos más.
La carrera fue una fiesta y al final, es curioso que un mexicano haya alcanzado el sitio último del podio. Es simbólico, ya que, en los últimos de vida de la Champ, la carrera de Monterrey y después de la la ciudad de México se convirtieron en verdaderas bocanadas de aire para el serial. Tan sólo en la primer visita a la ciudad de México se rompió el récord de asistencia en un evento de la serie.
Hoy, la serie ha muerto. Yo me hice fan del automovilismo en la Cart. Muchos, como yo, lamentan su partida, pero al menos Domínguez estuvo ahí, al final, dando la cara por los aficionados mexicanos que con él, nos hicimos totalmente Champ Car.