Me gustan mucho las historias donde un héroe tiene que sobrellevar grandes penas y resurge cual ave fénix, dejando atrás la envidia, su impotencia, su dolor, etcétera. Y me gusta cuando el héroe, derrotado, humillado por los otros, etcétera, huye a su especie de templo de la soledad y vuelve por sus fueros...
Ah... la vida como lector de novelas rosas o trillers me está, sinceramente, afectando. Sólo está semana leí la historia de Nostradamus que roba objetos de científicos para ver el inicio del universo, la vida amorosa de una hotelera rural y su amor por un escritor de trillers y la novela sobre un tipo que busca la ópera secreta de Mozart... y... lamentablemente para mí, estoy emocionadísimo con la historia de la hotelera rural y su escritor de betlsellers...
Ya soy lector de betsellers... adiós a la otra Literatura.
1 comentario:
Los bestsellers están para recordarnos cuando eramos lectores inocentes. Pienso en mis lecturas de cuando tenía 12 o 13 años y me emociono.
Me dan hueva los mamones que presumen (porque muchos de ellos ni siquiera dicen la verdad) que se inciaron como lectores con Borges, Carpentier, casi casi que te dicen que con Lezama Lima. Que no mamen. Si son hijos de los años 70 en delante, me es difícil creerles.
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