lunes, febrero 18, 2008

¿A o b?

Hace tiempo, un amigo de Aguascalientes me contó que hubo un cisma en su taller de cuento. Se reunían casi quince personas a tallerear y todo parecía estar bien hasta que un día, un asistente del taller, un, digamos, escritor avanzado, invitó a tomarse un café al tutor y le propuso dividir el grupo en un grupo A y uno B. En el A, estarían sólo los talleristas que hubieran demostrado cierto talento y malicia. En el grupo B, los talleristas con demasiado esfuerzo pero poca claridad narrativa. El maestro, cuyo nombre no recuerdo, pero todo esto ocurrió o debió de ocurrir por el 2000, escuchó atentamente la solicitud del escritor avanzado y dijo que lo plantearía al grupo. En el grupo, la bomba cayó mal y de malas. El maestro decidió dejar de dar el taller. Le dijo a mi amigo, cuando éste fue a pedirle que continuaran con las sesiones, “Esto es Aguascalientes, una ciudad chica, gente que sólo quiere escribir y ¿me salen con esto? El grupo no se volvió a juntar y el maestro, con la sabia idea de: ¿y para qué soporto esto?, decidió esconderse de la vida literaria y los talleres. En cambio, el escritor avanzado terminó dando su propio taller y a casi ocho años del cisma, nada o casi nada ha publicado, aunque sé que sigue pavoneándose como gran escritor. El resto de los alumnos se perdió. Algunos se acomodaron en otros talleres, pero aquel ímpetu que llevaba el grupo terminó por eclipsarse.
Ahora en Monterrey, sé que ha ocurrido lo mismo al interior del Centro de Escritores de Nuevo León y pienso de nuevo en aquellas palabras del maestro hidrocálido: “Esto es Monterrey, una ciudad chica, gente que sólo quiere escribir y ¿salen con esto? La cuestión es: ¿qué grupo es el mejor, el A o el B?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Y TÚ EN CUÁL ESTABAS? ¿EN EL "C"? ¿O DE PLANO TE MANDARON AL "D"?

Anónimo dijo...

jajajajajaja, el anónimo, no le gusta el blog y se queda a leer todo. ¿Así o más ardor?

Herr Boigen dijo...

Increíble triste pero continua historia de los talleres literarios y los círculos literarios. Cuántas veces no he visto / escuchado / vivido historias similares.